miércoles, 24 de febrero de 2010

Haciéndole al Cuento

Haciéndole al Cuento






Tengo un primo superinteligente, estudio ingeniería electrónica y demostró tanto talento que los japoneses se lo jalaron para que trabajara en su tierra, pero no sé porque razón, tal vez el exceso de trabajo, la vida de tan altísimos estándares que se vive en el otrora imperio del sol naciente, alguna droga o un maldito gen recesivo que se pasea entre algunos miembros de la familia incluyéndome, le causaron un cortocircuito en su híper-desarrollado cerebro y por algunos años se nos deschaveto. Me gustaba platicar con él pues incluso en su locura lo que decía me parecía con bastante chispa. En una de estas pláticas me sacó una idea sumamente original, que desde luego yo creí que solo era producto de su desequilibrio. El decía con respecto de las calculadoras de bolsillo, que ya en esa época eran pequeñas:“he revisado estos artefactos y no hay manera de que con los componentes que tienen puedan efectuar las operaciones que realizan, tengo una teoría, y creo que todas estas anchetas están de alguna forma conectadas con una computadora central, -de esto hace unos 35 años y no había computadoras individuales en México- ella es la que realiza las operaciones y luego les transmite los resultados a estos aparatos”


Yo me quedé con la idea de que dicha forma de pensar era provocada por su malestar y con el paso del tiempo ya se me había olvidado, pero hace algún tiempo encontré a un grupo de personas que sostenían una teoría parecida, que me hizo acordar de mi primo y su locura, estas personas afirman que todos las mentes de las personas están interconectadas y que dependen de un gran cerebro, posiblemente algún espíritu superior, que es el que controla a todos, nos infunde ideas y transmite ordenes, también hace posible que atreves de esta red se envié e intercambie cantidades enormes de información, entre otras muchas funciones tiene el objetivo de detectar a las personas malas o negativas, para prevenir a los demás de sus actos o para que “las personas buenas” puedan darse gusto atormentando a las malas al travez de las conexiones que proporciona esa hiperconciencia.







Esa seria una buena explicación para muchos tipos de locuras y/o neurosis, pues el que la ”las personas buenas y honestas” puedan estar atormentando a las que no son como ellas, puede causar que los que no estan actualizados o conscientes de este flujo de ideas, se crean completamente deschavetados y se pongan hasta la coronilla de fármacos que son los que les impidirían llevar una vida normal, otra función que esta supermente efectua es la de anular las mentes de aquellos que no cree, por sus acciones, dignas de usar un cerebro, a estas se los desconecta y a partir de ahí son los buenos los que aparte de atormentarlos les llevan por la vida, que loco ¿no?





Esto llevaría a deducir, que de darse esto, no habría “personas buenas“ ¿pues como una persona buena o inteligente va a martirizar a otra?, o le va a quitar la opción que D-s le dio de elegir entre el bien o el mal, o va a perder el tiempo viendo que hacen de malo o de bueno los demás, solo una persona trastornada o anormal puede hacer eso, pero si esto fuera cierto, tendría como consecuencia que “las personas buenas “se deschavetarían" de tanto trabajo y de tanto conocer atrocicades, aunque por lo reducido de las personas que manifiestan locuras o neurosis, una de cada cinco, se ve que los que están al tanto de esto no se emplean a fondo, pues la manifestación de las consecuencias o efectos de esta persecución deberian de ser visibles, a como están las cosas, en muchas mas personas.

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